Desde la Concejalía de Educación, este curso queremos dar un impulso a la participación de las familias y a la consolidación de la Red de huertos escolares de Torrelodones. Por eso, hemos invitado a las familias a través de las asociaciones de madres y padres a poner sus manos en la tierra, queremos crear comunidad a través de la actividad agrícola.
La participación es uno de los ámbitos claves para la Agroecología escolar. Participando el alumnado y la comunidad educativa, por extensión, aprendemos vías de participación real y efectiva y nos convertimos en custodios del territorio para su comprensión y cuidado.
Durante los meses de febrero y marzo hemos estado realizando actividades en los colegios de Torrelodones con este fin. En cada centro la actividad se ha adaptado a sus necesidades y como no, a la estacionalidad en la huerta.
¿QUÉ HEMOS ESTADO HACIENDO?
En el CEIP Nuestra Señora de Lourdes
Se ha creado un grupo motor para un proyecto participativo para la transformación del espacio exterior en uno más inclusivo, natural y verde. Aprovechando la iniciativa de la AMPTA, que está diseñando un proyecto en este sentido, el proyecto de dirección del centro, que tiene la renaturalización en sus líneas de trabajo y con la huerta al cole, se planteó una reunión en la que sentar las bases de los beneficios de la naturalización y una dinámica participativa donde soñar para definir nuestro patio ideal.
Como conclusión; necesitamos escuchar a toda la comunidad, es un proceso que sabemos que está empezando, pero no sabemos cuando terminará. Podemos hacer ya pequeñas acciones que generen cambios grandes, tenemos el apoyo de mucho agentes implicados. Todo un éxito.
CEIP Los Ángeles
Durante una tarde las familias hortelanas, el equipo directivo y Óscar el hortelano, construyeron una nueva zona en la huerta: la espiral de aromáticas, una técnica de cultivo en poco espacio que genera muchos ambientes diferentes para plantas aromáticas medicinales y codimentarias con diferentes necesidades de insolación, humedad y temperatura. Fue una jornada de trabajo colaborativo muy productiva.
En la EEI Las Ardillas y en el Colegio San Ignacio de Loyola
La actividad fue Amadrina un semillero, una sesión entre semillas en la que cada familia sembró una especie hortícola o acompañante para aprender el cuidado y la observación.
En la próxima sesión, en el momento del trasplante, se hará una jornada de intercambio de plantas entre las familias (para huertos de sus casas) y la plantación de los huertos de ambas escuelas.
En la Escuela Infantil El Tomillar
Quisimos relanzar la participación familiar, que es muy intensa e importante en las dinámicas de la escuela y es impulsada por la actividad de un grupo de padres y madres de ecoescuela, coordinadas con el equipo pedagógico.
Nos hacía falta un invernadero, ¡y lo hicimos!
Se construyó un pequeño bancal pegado a la valla donde queremos, en otra jornada, plantar plantas trepadoras que, al crecer, formen un muro verde con flores para embellecer, atraer insectos beneficiosos y, con una estructura, convertirlo en un refugio vegetal donde jugar.
En el CEIPSO El Encinar
Se creó un nuevo bancal como santuario de polinizadores reciclando una gran caja de madera, que se rellenó de hojas restos vegetales y tierra de la zona del huerto antiguo.
Además, pintamos el muro del huerto. Todo un logro en una jornada de trabajo con alrededor de 12 familias y 40 personas grandes y pequeñas. En las imágenes se pueden ver los resultados.
En todos los colegios se han creado grupos de participación a modo de comunidades de aprendizaje participa-tivo. Seguimos en contacto para crear redes que hagan de nuestro cole un lugar más sostenible, habitable y saludable.
Gracias a todas las AMPTAS y a todas las familias que han participado; y gracias también a los centros y al Ayuntamiento por las facilidades en la organización.
Reportaje publicado en el nº 393 de la Revista de Torre. Puede descargar el archivo pdf de la revista aquí