Las obras que se han realizado en la piscina municipal se centraron en la renovación de los vestuarios con el fin de mejorar las condiciones de salubridad, accesibilidad y uso de los mismos. Esta reforma incluye la remodelación integral del vestuario femenino (zona antigua), vestuario masculino, vestuarios de monitores, vestuario infantil (zona no reformada), aula de la planta superior, recepción y hall de entrada.
La superficie construida del área de actuación es de 380.68 m2.
Las obras han durado tres meses.
El miércoles 6 de octubre, tras la reforma, el centro de natación ha abierto sus puertas ofreciendo las actividades habituales para niños y adultos en las instalaciones que contienen dos piletas normalizadas para la práctica, enseñanza, y difusión de la natación en la mayoría de sus facetas; natación deportivo-recreativa, desde los bebés hasta la tercera edad. Se mantienen las medidas de prevención contra el covid en la distancia mínima de seguridad, el uso de la mascarilla hasta el borde de la piscina, el uso de gel hidroalcohólico y ventilación con frecuencia. En cuanto al aforo ya no hay restricciones de acceso.