A partir de los restos conservados se ha podido determinar que pertenecen a un plan de construcción de piezas en serie para puentes que se levantaron durante el siglo XVIII con el objetivo de mejorar las comunicaciones desde Madrid. Destacan entre ellos el puente de Peregrinos de 1725, el de San Fernando de 1750 y el puente de Peguerinos; éste último construido, al igual que el del arroyo de la Torre, entre 1751 y 1786 y de muy similares características.
En la actualidad, se ha estudiado la posibilidad de dar a las piezas sueltas del pretil un destino más noble que el actual, y hacer una recreación ornamental con todas ellas a partir de los datos que han arrojado las investigaciones acerca de la posible estructura y apariencia del puente.
Ubicación: restos en el Parque JH y en la Avenida de Valladolid.
De Vicente Muñoz, José. Crónicas de Torrelodones y Comunidad de Madrid. 1ª ed. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 1989.
Antonio Iraizoz García. El puente sobre el arroyo de la Torre: si las piedras hablasen.
Ciclo de conferencias celebradas en la Casa de la Cultura de Torrelodones el 27 de mayo de 2015.
La Biblioteca Municipal Juan Van-Halen es un proyecto singular, ubicado en un edificio singular: Villa Fabriciano.
Se trata de una obra de Francisco Sáenz de Oiza, galardonado con la Medalla de Oro de Arquitectura (1989) y el Príncipe de Asturias de las Artes (1993), lo que viene a otorgar, sin duda, un valor añadido a la propia biblioteca.
El edificio tiene una planta rectangular aislada haciendo esquina en sus orientaciones Norte y Oeste con las Calles Jesusa Lara y Ángel Yagüe y en sus lados Este y Sur con un patio que linda con las parcelas vecinas. La cubierta se divide en dos con forma de pirámides truncadas y coronadas por dos lucernarios. A la planta rectangular, se suman dos cuadrados que son la base de los pabellones de cobertura desde los cuales se establecen las líneas de ordenación mediante tres crujías longitudinales y seis transversales, en cuyas intersecciones se dispone la estructura vertical: soportes de hormigón armado en sus niveles inferiores y pilares tubulares de acero en el superior, sobre los que emerge la estructura metálica de los dos pabellones.
Ubicación: C/ Jesusa Lara 47, cerca de la Casa de Cultura.
Metalocus. Adela Bonas. "REVIVIR UNA REFORMA DE OÍZA. REFORMA Y ADAPTACIÓN PARA CENTRO CULTURAL Y BIBLIOTECA POR GABRIEL GALLEGOS BORGES".
El Molino de Juan Mingo se encuentra en el Valle del Gasco, junto a una plataforma natural definida por un doble recodo-meandro del río Guadarrama. Esta plataforma resulta perfecta para el emplazamiento de azud y aceña (azud: presa hecha en los ríos a fin de tomar agua para regar u otros usos; aceña: rueda hidráulica en el cauce de un río).
Los restos que se conservan del molino, propiedad de Juan Mingo, estuvo en funcionamiento probablemente desde el siglo XVI hasta el siglo XIX o principios del XX. En el siglo XVIII su actividad habría decaído según señalan el Catastro de Ensenada de 1751, donde consta como molino harinero abandonado.
No obstante, algunos estudios atribuyen al molino la función de taller de mármoles, debido a su morfología y a las escombreras cercanas que cuentan con abundantes restos de mármol de diferentes épocas y procedencias. Estas investigaciones situarían su origen a finales del siglo XVI, en relación con el entramado de instalaciones y canteras surgidas por la construcción del Monasterio de San Lorenzo del Escorial. En otros puntos de la Comunidad de Madrid se encuentran construcciones parecidas, como los dos molinos situados a la altura del Palacio Real (en el Manzanares) y en el Retiro, ambos pertenecientes al Real Laboratorio de Mármoles de Carlos III. Además, durante el siglo XIX y el despunte de la construcción de palacetes en la zona, es posible que también se usara como molino aserrador de mármol.
Hoy en día lo que se conserva del molino son los siguientes elementos: el azud, el canal de acometida, el pozo de aceña de unos 3 metros de profundidad, la nave de serrado con una planta de 22x15 metros, los estribos de piedra del puente del molino y las escombreras. Como anexos exteriores a la nave de serrado se pueden citar un patio estilo inglés hacia el noroeste y unos talleres de picado de piedra sobre una superficie delimitada por muros de contención en el río, donde aún quedan restos de postes de sujeción de techumbres vegetales.
Ubicación: Valle del Gasco. Propiedad privada, acceso restringido.
Departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Torrelodones.
M. Antonia Criado Lázaro. Archivo Histórico Municipal de Torrelodones. Disponible a través del enlace https://www.torrelodones.es/archivo-historico-municipal
Propuesta de elementos para la Carta Arqueológica y Catalogación de Recursos para el desarrollo turístico. Tomo I y II. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 2013.
El refugio Pradogrande es uno de los lugares que utilizó la población de la Colonia durante la Guerra Civil para refugiarse de los bombardeos. Se sitúa en la base de una loma de unos 10 metros de altura, en el parque de Prado Grande. Se trata de un pasadizo con dos entradas y una pequeña zona de estancia en su interior, mayormente excavado en la roca.
No se sabe con certeza si esta gruta existía con anterioridad al estallido de esta contienda, cuando Torrelodones queda incluida en el bando republicano, pero es seguro que en este contexto es cuando se acondiciona para usarse como refugio ante los bombardeos de la aviación nacional. Otros lugares que también sirvieron para cobijar a la población de Torrelodones fueron las alcantarillas de las vías del tren, el Canto de la Cueva o los refugios de la Calle Rufino Torres.
A día de hoy el refugio aún se conserva, pero no es accesible para el público. A finales de los años 80 fue inaugurado el parque de Prado Grande, sobre los antiguos terrenos de propiedad privada que fueron destinados, desde principios del siglo XIX, a coto de caza. En este parque, de propiedad municipal, se construyeron unas escaleras de piedra que dirigen a un mirador encima de la loma. En este mirador se sitúa una estatua en honor de la Virgen del Carmen, Patrona de la Colonia de la Estación y de los marineros, y elementos ornamentales en forma de proas de barcas. Además, el parque acoge desde 1989 las fiestas patronales de la Virgen del Carmen.
Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid nº 139, pp 224-226. 13 de junio de 2016.
Departamento de Prensa y Comunicación del Ayuntamiento de Torrelodones. Torrelodones ayer y hoy. 1ª ed. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 2000.
Se trata de un observatorio fortificado que formaba parte de la línea defensiva del frente Republicano Atalayuela-Pendolero, correspondiente al despliegue de la 8ª División durante la defensa de Madrid en la Guerra Civil española.
El puesto, blindado de ladrillo y hormigón, tiene una localización privilegiada por sus amplias vistas, desde donde se abarca una gran extensión de terreno y se divisa perfectamente el monte de El Pardo y la carretera de la Coruña, un eje fundamental durante toda la guerra. Cuenta con dos estancias, una de ellas con aspilleras, y otra con una terraza-mirador con barandillas, formando tres niveles defensivos:
En el primer escalón inferior, para cubrir la vaguada anexa al arroyo Trofas encontramos un primer nido de hormigón; con dos troneras y acceso en codo. En el segundo nivel, a mitad de la ladera, encontramos un segundo nido; con dos troneras, acceso en codo, hornacina de obra y una galería excavada en la roca, destinada a refugio contra bombardeo. Por último, en la cumbre y flanqueado por varias trincheras, encontramos el tercer nido, que incluye además una hornacina para aperos, personalizada con la inscripción “1938 AR”, así como otro grafito que indica “Madrid”.
Durante la guerra civil, en la cual el palacio del Canto del Pico fue utilizado como cuartel general del ejército republicano en la batalla de Brunete, este observatorio, debido a su elevada posición y a su cercanía con el Canto del Pico, desempeñó un papel importante.
Actualmente el observatorio está cubierto de pintadas y faltan tramos de barandilla, pero el conjunto de su estructura se mantiene en buen estado.
De Vicente Muñoz, José. Crónicas de Torrelodones y Comunidad de Madrid. 1ª ed. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 1989.
Departamento de Prensa y Comunicación del Ayuntamiento de Torrelodones. Torrelodones ayer y hoy. 1ª ed. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 2000.
Propuesta de elementos para la Carta Arqueológica y Catalogación de Recursos para el desarrollo turístico. Tomo I y II. Madrid: Ayuntamiento de Torrelodones, 2013.