Desconocemos el nombre árabe con el que se conocía nuestra Atalaya desde su construcción en el siglo X. En las crónicas árabes anteriores a la Reconquista, cuando se interesaban por los caminos para fijar etapas y distancia entre ellas, lo hacían tomando como referencia las alquerías, no las fortificaciones. Lógicamente, aquéllas eran donde podían “repostar” viajeros y animales y no sabemos si hubo alguna alquería por aquí cerca.
En todo caso, lo que sí queda claro es que, Torrelodones, es una palabra romance, por tanto, posterior a la reconquista de Toledo (1085), que aparece identificando plenamente a nuestro pueblo en los documentos ya en 1287. Desde entonces, se ha mencionado de todas las formas posibles: Latorrelodones, Latorredelodones, La torre de los Lodones, La Torre de Lodones, Torre Lodones, Torrelodones o simplemente Torre… por su parte, la tradición nos ha legado varias las especulaciones:
- Palabra compuesta de Torre y Lodón, el árbol también conocido como almez.
- Palabra compuesta de Torre y Lodones, quizá, por los grandes lodos que ocasionalmente se formaban en la zona (de nuevo mencionamos a Don Carlos Picabea cuando en la obra citada, página 6 dice: la tradición atribuye a los árabes la fundación del pueblo de Torrelodones y convienen las crónicas en que se llamó así porque tuvo sus comienzos en una gran torre en derredor de la cual se formaban grandes acúmulos de “lodos” en tiempos de lluvia y nieve.
- La leyenda de un tal Don Tirso de Lodón, señor de la Torre.
- También hay otros personajes llamados Don Odón, Don Ordón... que pudieron ostentar su señorío.
- … pero, hasta ahora, son sólo eso, especulaciones y leyendas.